Encerrados, el escape room dentro de un ascensor de Megan Goldin

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08/06/2020 por Gutiérrez que le Leo

La premisa de Encerrados, de Megan Goldin, me pareció interesante. Cuatro ejecutivos encerrados en un ascensor, atrapados en un escape room a modo de team building. Entre los escapes rooms virtuales que tanto nos han ayudado a «salir» en la época del confinamiento, y las actividades team building que tanto se llevaban en la antigua normalidad (y que no sabemos qué será de ellas en la nueva normalidad…), una novela sobre un escape room no era novedad, pero me pareció apetecible.

Aunque comienza de manera explosiva, a lo largo de sus casi 400 páginas consigue que te olvides del inicio, y vuelvas a sorprenderte con el final. La autora nos va presentando a los distintos personajes atrapados en el ascensor y a otras personas que forman parte de su equipo laboral. Nos los presenta como altos ejecutivos con un ritmo frenético de trabajo que es el que articula sus vidas, unas vidas poco modestas, acordes al mundo en el que se mueven.

Pero de repente todo se viene abajo cuando entran en ese ascensor, donde permanecerán encerrados hasta que resuelvan los enigmas. Y es que, como dice el subtítulo de la portada: «El objetivo es simple: salir con vida«.

Aunque la novela ha conseguido engancharme, es fácil de leer, y la intriga te hace seguir hacia delante, me ha decepcionado que no explote más la premisa «escape room». Como lectora quería participar del juego, pero está más planteada a que sean los personajes quienes resuelvan las pistas. Tan solo he podido participar en la resolución de uno de los enigmas, y además tenía una errata (por lo menos en la traducción). Aún así, Encerrados, como novela de verano para llevarte a la playa (cuando se pueda) y desconectar un rato, puede pasar.

Eso sí, si queréis algún escape room virtual para entreteneros, os recomiendo Imperio, de Sam & Cooper.